Me siento algo confusa. Las horas pasan por el fuego de la lumbre. Los minutos se van haciendo ceniza. Y mientras los segundos se van volando por ahí. Confío en el que los días me dejen huella, que no sían simples esperpentos de una noche que aún no sucedió. A veces no soporto las miradas indiscretas por la calle. A veces odio que me despierten. Otras muchas amo que un mensaje me haga abrir los ojos a medianoche.
Un suspiro vuela merodeando mi ventana. Una sonrisa se posa en el alfeizar. No hace nada, solo disimular lágrimas. Y ahora, solo... ¿Qué queda?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Nubes de Limón
Limoneros
Vie.
Veces que soñé
- marzo (1)
- febrero (1)
- enero (1)
- enero (1)
- febrero (2)
- diciembre (1)
- noviembre (1)
- abril (1)
- febrero (2)
- diciembre (1)
- noviembre (1)
- septiembre (1)
- agosto (1)
- abril (1)
- enero (1)
- diciembre (1)
- octubre (1)
- mayo (2)
- abril (4)
- marzo (2)
- febrero (2)
- noviembre (4)
- septiembre (1)
- julio (1)
- junio (2)
- mayo (2)
- abril (5)
- marzo (4)
- febrero (10)
- enero (18)
- diciembre (9)
- noviembre (2)
- octubre (7)
- septiembre (7)
- agosto (1)
- julio (3)
- junio (6)
- mayo (10)
- abril (11)
- marzo (10)
- febrero (14)
- enero (3)
- diciembre (2)
- noviembre (1)
- octubre (2)
No hay comentarios:
Publicar un comentario